La bodega Enate decidió desde sus comienzos, en 1992, que la cultura contemporánea sería un rasgo imprescindible en su carácter. Se arraiga en unos orígenes espectaculares y bellos entre los cuales se ha cimentado en la cultura autóctona que sorprende por sus bellísimos matices y contenidos.
Hoy, ENATE, es bodega y museo. Es al tiempo vinoteca y galería artística, y ha fraguado su personalidad en la exquisitez de ambas. Sus barricas y sus paredes resumen los grandes vinos de España, habitados por la genialidad de los grandes creadores.