El chacolí (txakolin en euskera) es un vino, normalmente blanco, que se produce en las regiones de País Vasco, Cantabria y Burgos, y en algunos lugares de Chile. Se elabora a partir de uvas con cierta acidez. Las variedades principales cultivadas son hondarribi zuri y hondarribi beltza, esta última mucho menos extendida). Es ligeramente carbonatado y con una graduación alcohólica algo inferior a los vinos tradicionales.
Antaño el chacolí era producido en caseríos o casas de campo de manera artesanal. Fue objeto de comercio, al menos desde principios del siglo XVI en Guipúzcoa, de cuando data el primer documento histórico en el que se hace referencia al chacolí como tal. Su producción no es muy amplia y es consumido principalmente en el País Vasco, La Rioja, Navarra, Cantabria y norte de la provincia de Burgos, extendiéndose poco a poco a otras zonas gracias a la restauración.
En 2005, con miras a revitalizar la cultura enogastronómica en Bizkaia, Eneko Atxa y su tío Gorka Izagirre diseñaron un proyecto singular uniendo la alta cocina y el mundo del vino, convirtiéndose así en referentes de ambos sectores.
El objetivo de la Bodega Gorka Izagirre es ser partícipe de la evolución de los vinos de Bizkaia, fortaleciendo el cultivo de variedades autóctonas y creando vinos blancos de calidad que reflejen la identidad de unas variedades únicas en el mundo.
El equipo de Gorka Izagirre se esfuerza a diario para situar sus vinos en el mundo. Ya cuenta con presencia en más de 15 países y ha recibido varios reconocimientos a nivel internacional.